3/21 SIENDO UN HOGAR DONDE DIOS HABITE

DEVO 3/21

P.S. Ricardo Giacoman Marcos

PASAJE CENTRAL

“Porque el Señor es el Espíritu; y donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad.”

2 Corintios 3:17 (RVR1960)

 LO QUE VEO

¿Qué tan importante es pasar tiempo con Dios?, bueno si nos apegamos a lo que la biblia nos enseña, es de destacar que, existen un sin fin de ejemplos que nos hablan acerca de la necesidad que tenemos como hombres de tener un tiempo con Dios, de sentirnos cerca, de caminar con él y, de relacionarnos con ese Dios tan maravilloso que está lleno de amor inagotable, que busca tener una relación cercana con su creación y con sus hijos.

LO QUE RELACIONO

Ahora bien, ¿Sabías que, el Dios que creo los cielos y la tierra, el Dios eterno, el Dios que hizo todo lo que tú y yo vemos quiere tener una relación contigo?, bueno, si no lo sabías, te confirmo que es así, ese mismo Dios nos está buscando todo el tiempo y, no requiere de intermediarios, ni tiene  secretarios a los que tú y yo podamos llamarles para hacer una cita; tampoco necesita de aquellos “santos hombres” que intercedan por nosotros para tener favor y gracia delante de él; y mucho menos, Dios tiene un buzón o una dependencia donde podamos llevar nuestras sugerencias y quejas para la atención de nuestras necesidades, nuestro Dios no es así y nos da libre acceso a que podamos entrar a su presencia diariamente, a que lo busquemos pues el habita en medio de nosotros.

Bajo tal óptica, si nos ubicamos en el día en que Dios creo al hombre, podemos identificar que el principal anhelo y deseo de Dios al crearlo, fue para que pudiera tener una relación personal y creciente con Él, adorándolo y glorificándolo con gusto y amor aquí en la tierra, no obstante, también podemos analizar que, desde el inicio de la creación el hombre decidió su autonomía, decidió ser su propio dios y a causa de estas malas decisiones, Dios se separó del hombre, puesto que, Dios ya no podía habitar en medio de nosotros porque había pecado y Él es un Dios santo; pero espera, te tengo buenas noticias, Dios no es un Dios que cambia, Él sigue teniendo el mismo plan hasta nuestros tiempos, es decir, el mismo anhelo y deseo de relacionarse con el  hombre y amarlo, tal como se desprende de una parte del versículo 16, del capítulo 6, en 2 Corintios: “...Viviré en ellos y caminaré entre ellos, yo seré su Dios y ellos serán mi pueblo...”

Dios quiere hablarte a ti, Dios quiere entrar en tu familia, en todas y cada una de tus relaciones para poder bendecirte, no hay nada más hermoso que conocer a Dios y sentir su presencia.

Para ejemplificar mejor como es vivir sin la presencia de Dios en su vida, quiero dar mi propio testimonio, así tendrán un mayor alcance de entendimiento acerca de lo que es desperdiciar tu vida fuera del propósito de nuestro Padre; así pues, mi historia comienza en una temporada de mi vida en la que estaba completamente alejado de Dios, no tenía ningún respeto por Él y, por ende, esa actitud de rebelión  me llevó a tomar decisiones equivocadas, desencadenando en mí el querer buscar satisfacción a través de relaciones, a través de excesos, a través de un estilo de vida que me destruía y no me llevaban por un buen camino; no obstante, un hombre que honro y doy gracias por su vida a Dios, Víctor Valerio, tuvo la valentía de decirme a mis veintiún años que, Dios tenía planes increíbles para mí y que ese mismo Dios quería venir a restaurarme con su gracia y con su infinito amor, así como que, bastaba permitirle entrar a Cristo Jesús a mi corazón, bastaba esa fe, para que Dios hiciera todo lo demás.

De tal manera que, sin tener muchas opciones, por cómo estaba llevando mi vida y, al seguir sintiendo hambre y un deseo insaciable que nadie podía llenar, le di la oportunidad a Cristo de que Él fuese el que llenara mi ser y me restaurara; Dios me sanó, me transformo, me libero y el día de hoy soy una persona que te puede decir que tiene gozo en las pruebas, que tiene salud y, más que nada, tengo una paz que sobrepasa todo entendimiento, aunque este en medio de la prueba, mi fe puede decir “puedes permanecer confiado porque Dios tiene el control”.

LO QUE APLICO

Cuando ponemos nuestra vida en Dios, no quiere decir, que no vamos a tener pruebas y dificultades, sino que, aun cuando las tengamos las podremos librar juntamente con Él, Dios es un Dios que está en medio de nosotros, Él me salvó y me libró de todo temor y puede hacer eso por ti también, un mejor ejemplo, es lo que de manera textual dice su palabra en Salmos 34:

“Oré al Señor, y él me respondió; me libró de todos mis temores. Los que buscan su ayuda estarán radiantes de alegría; ninguna sombra de vergüenza les oscurecerá el rostro. En mi desesperación oré, y el Señor me escuchó; me salvó de todas mis dificultades.”

Salmos 34:4-6

En ese orden de ideas, aun cuando, yo no te conozco ni conozco cuáles son tus temores, ni todos estos miedos que te quitan la paz, quiero decirte que, el día de hoy podemos confiar en que Cristo Jesús nos librará de toda inquietud, pues Él al igual que nosotros, paso por dolores similares con los que usted y yo estamos lidiando actualmente, por lo que, te invito a confiar en Dios, pues su único hijo, Jesús, tomo nuestro lugar al ser despreciado, rechazado y recibir el dolor más profundo por nuestros pecados.

LO QUE DECLARO

“NI EL TEMOR, NI LA INSEGURIDAD, SON PARTE DE MI VIDA, PORQUE HE ACEPTADO A CRISTO JESÚS, SABIENDO QUE SU PERFECTO AMOR HECHA FUERA TODO TEMOR”.

LO QUE ORO

·         Por estar todos y cada uno de mis días en presencia de Dios.

·         Porque su propósito se cumpla en mí y en mi familia.

·         Para que disipes todos mis miedos y temores, pues hoy pongo mi confianza en ti.

 DIOS LES BENDIGA.